Hace exactamente 9 años, la chica que trabajaba en casa le escribía este tema (pero completo), a su amor en el reverso de la tapa del CD de los continuados, obviamente, comprado en la placita por $3. Escuchaba el tema hasta donde podía acordarse y lo paraba, escribía, ponía play, paraba y escribía, y así... desesperante.
El brillo de sus ojos mientras escribía resumía todo lo que sentía por ese hombre.
Casado con hijos, que le decía a su mujer que se iba a trabajar cuando en realidad estaba haciéndole el amor a su vecina, Luisa, en la cama con la que los chicos de jardín juegan en la escuela.
Mario, era el portero de la escuela nº182 que a diferencia de Luisa,no tenia ese brillo en los ojos,hasta hoy puedo llegar a entender que solo sentía mucha pasión o calentura, para ser mas clara.
Pero Lu se las banco todas, conoció todos los moteles de la avenida Urquiza y se aguanto el dolor del sexo anal, solo por verlo feliz. Gastaba lo poco que ganaba en llamarlo desde una cabina para hablar horas de vaya uno a saber qué, en invitarlo a comer helado, en regalarle CDs truchos de La nueva luna y Escuchá . Entre las canciones dedicadas que musicalizaban la historia de mis amigos, había canciones como "Eres mi religión", y "Vengo de la casa de ella".
Así de variado era, así de difícil de elegir de que lado estar, quien era mas hijo de puta.. los que si es cierto es que hoy, nueve años después del comienzo de esta aventura. Luisa dijo basta, basta de tener llamados de la mujer de Mario acusándola de "roba-marido", basta de ver llorar a sus hijas por las agresiones sufridas, basta de preguntas incomodas de los vecinos, basta de esas miradas amenazantes en la iglesia,basta de dormirse llorando, basta de no tener fuerzas.
Hoy, a las cuatro y alguito de la mañana, Lu se arrancó la vida de un trago, hoy pasó al otro lado de la moneda, sin pensar en sus hijas, sus hermanas, sus amigos.. en Mario. Se durmió, se hundió, esperando que Dios la perdone, o algún día volver a encontrarse con él allá arriba, y tomar mate escuchando Los continuados.
